Rejuvenece tu piel con la precisión del láser CO2 fraccionado médico. Un tratamiento que mejora la textura, luminosidad y firmeza de la piel, suavizando arrugas, cicatrices de acné y el llamado “código de barras”. Ideal también como preparación facial antes de eventos (“velo de novia”).
El láser CO2 fraccionado es una tecnología médica avanzada que utiliza microhaces de luz para eliminar de forma controlada las capas más superficiales de la piel. Estimula la regeneración del colágeno y la elastina, consiguiendo una piel más firme, lisa y rejuvenecida.
El láser CO2 emite energía térmica que vaporiza microcolumnas de tejido, generando una renovación cutánea controlada.
Mientras la capa superficial se regenera, las capas más profundas producen nuevo colágeno, lo que mejora de forma progresiva la calidad y firmeza de la piel.
Tras la sesión, la piel se renueva desde el interior: las arrugas se suavizan, las cicatrices se difuminan y el rostro recupera un aspecto más uniforme y luminoso.
Tecnología médica perfecta para un tratamiento facial
Este tratamiento médico está indicado tanto para rejuvenecimiento facial como para la mejora de la textura y las imperfecciones cutáneas. Es una opción eficaz para quienes buscan resultados visibles sin cirugía.
El láser CO2 suaviza líneas de expresión y arrugas profundas, especialmente en frente, contorno de ojos y boca. Favorece una piel más firme, con poros cerrados y textura uniforme.
Gracias a su efecto regenerador, el tratamiento reduce las marcas de acné y cicatrices superficiales, alisando la superficie cutánea sin alterar el tono natural de la piel.
Ideal para tratar las arrugas verticales del labio superior (el “código de barras”), devolviendo al contorno de la boca una apariencia más lisa y rejuvenecida.
Una opción perfecta para iluminar y revitalizar la piel antes de un evento importante. El láser CO2 proporciona una textura suave y una luminosidad natural.
A diferencia de otros láseres estéticos, el CO2 actúa tanto en superficie como en profundidad, con resultados visibles desde la primera sesión.
Estimula el colágeno y mejora la firmeza cutánea.
Disminuye arrugas, manchas y cicatrices.
Mejora la textura y el tono de la piel.
Resultados duraderos y naturales.
Dependiendo de la intensidad y zona tratada, puede aparecer un leve enrojecimiento o descamación durante unos días. En ENEA utilizamos protocolos médicos personalizados y cuidados post-tratamiento para garantizar una recuperación cómoda y segura.
El láser CO₂ estimula de forma directa la regeneración del colágeno y la elastina en las capas más profundas de la piel. En los días posteriores, la piel se renueva de manera natural, mostrando un aspecto más liso, luminoso y firme. Los resultados son progresivos y duraderos, mejorando visiblemente la textura y el tono con cada sesión.
Resultados reales, con enfoque médico y natural
En ENEA combinamos tecnología médica avanzada y la experiencia de nuestras doctoras especialistas en medicina estética facial. Trabajamos siempre con un enfoque médico, realista y personalizado para obtener resultados visibles, seguros y naturales.
Antes de cada sesión, valoramos tu fototipo, textura y sensibilidad cutánea para ajustar la potencia y la profundidad del láser a tus necesidades concretas. Cada protocolo se adapta a ti.
Utilizamos láser CO₂ médico de última generación, con control total de energía y precisión. Un equipo seguro, aprobado para uso clínico y con resultados clínicamente contrastados.
El tratamiento logra una mejora real en arrugas, textura y luminosidad de la piel. Los resultados aparecen progresivamente y se mantienen a largo plazo gracias al estímulo de colágeno.
Nuestra clínica en C. de Serrano, 85 (Madrid) ofrece un entorno médico-estético de confianza, con atención personalizada, sin prisas y en manos de especialistas en rejuvenecimiento facial.
Es un láser médico fraccionado que emite microhaces de luz para renovar la piel desde las capas profundas, estimulando colágeno y mejorando textura, arrugas y cicatrices.
Depende del estado inicial de la piel y el objetivo. Generalmente entre 1 y 3 sesiones ofrecen una mejora visible y progresiva.
Se aplica anestesia tópica antes de comenzar, por lo que la sesión resulta muy tolerable.
Una sesión dura entre 30 y 60 minutos. La piel puede enrojecerse o descamarse unos días, pero puedes retomar tu rutina habitual en poco tiempo.
La piel se ve más lisa y luminosa tras la primera sesión, aunque los resultados mejoran en las semanas siguientes conforme se regenera el colágeno.
Se recomienda evitar los meses de alta exposición solar. Es ideal realizarlo en otoño o invierno para garantizar una recuperación segura y homogénea del tono de piel.
El láser CO₂ actúa de forma más profunda y precisa, mejorando la estructura dérmica desde el interior, mientras otros tratamientos solo trabajan en superficie.
